«Hoy en día la medicina es ciencia y humanismo y ese es el auténtico valor que debemos darle». Palabras que el Dr. César Ramírez Plaza ha pronunciado durante el Desayuno Inspirador organizado por CIT Marbella el pasado martes 8 de octubre en el Hotel Gran Meliá Don Pepe. Presentado por la Gerente de CIT Marbella, Begoña Castillo; y conducido por el periodista Julio Rodríguez, estos encuentros buscan fomentar valores que aplicados a la empresa, mejoren el tejido empresarial y por ende, la sociedad de la zona.
Vocación, profesionalidad, exigencia, ciencia y humanismo. Valores que vive y transmite nuestro fundador y que son los que han hecho posible el nacimiento de Bisturí Solidario, y que podamos también contar con el empuje de toda la sociedad malagueña. El Dr. César Ramírez confiesa que en Quironsalud ha tenido la oportunidad de poner en marcha el proyecto de su vida y «poner en práctica la medicina de la única forma que la entiendo, con vocación y pasión y siempre al servicio de los demás, poniendo al paciente, la persona, en el centro». Es precisamente esta forma de hacer medicina a nivel local y transmitirlo a la ciudad a través de las tecnologías, y las nuevas formas de comunicarse como las redes o internet, cuando «fui consciente de todo lo que se podía hacer».
La toma de contacto con las necesidades de la gente fue en la India, en 2015, durante su primer viaje en expedición para operar a personas sin recursos. Fue aquí y en Ecuador donde el Dr. Ramírez Plaza percibe que se podría hacer mucho más de lo que se está haciendo y es cuando decide fundar Bisturí Solidario: «Me doy cuenta de que con mi empuje y con la ayuda de Málaga podemos remar más y más fuerte», aunque reconoce que para dar una vuelta total a la situación de estos países en vías de desarrollo «necesitarían cambios a otros niveles y decisiones gubernamentales en los que nosotros ya no podemos entrar».
Estos tipos de eventos como Desayunos CIT «nos ayudan a desarrollar nuestra actividad solidaria, para que cada vez sea más gente la que nos conozca y se sumen al proyecto y ayuden a remar», agradece el Dr. Ramírez Plaza. La mayor satisfacción es poder devolver salud a las personas.
Ciencia y Humanismo: Ejemplo y equipo
La medicina humanista es el modelo que ha implantado el Dr. César Ramírez en el servicio de cirugía que lidera y que es imprescindible para acompañar y tratar, para dar también malas noticias; porque la cirugía es una especialidad que tiene «la capacidad de impactar en la salud de los pacientes de forma muy evidente». Por eso los médicos «debemos exigirnos estar al máximo nivel» y teniendo en cuenta que «las personas son el eje de nuestra atención».
Tal es la formación en humanismo que ofrecen a sus médicos en prácticas que han conseguido ser el «primer lugar de destino para los estudiantes de medicina en Alemania en lo que a cirugía del cáncer se refiere». Y también porque les involucran antes de cada misión «ellos ven cómo preparamos cada campaña con Bisturí Solidario, aprovechando por ejemplo materiales abiertos como mallas o gasas que están sin usar y que aquí se tirarían, pues la normativa prohibe usar aquí material abierto, pero en Liberia se esteriliza y salva vidas».
Una pasión y vocación que comparte con su equipo. Trabajar al más alto nivel es lo que ha hecho posible que batieran récord de operaciones el lunes 7 de octubre: operaron a 26 personas, de los que 15 recibieron el alta a las 9 de la mañana del día siguiente. Pacientes a los que ve y atiende personalmente sin importar el día de la semana que sea: «cuando una persona se ha operado da lo mismo que sea jueves que domingo, te necesita y tú debes estar ahí». Eso es el humanismo. «No debemos tratar enfermedades, sino personas. Todos nos acordamos de si nos han operado o no, es un evento trascendental en nuestra vida y esa es la importancia que debemos darle los cirujanos cuando tratamos a una persona que va a enfrentarse a un momento así».
El Dr. César Ramírez Plaza admite que es muy difícil «cambiar el chip» y pasar de cirugías extremadamente complejas como las cirugías del cáncer que realiza en Málaga y pasar a la cirugía más básica y elemental; pero lo seguirá haciendo. Porque no considera dejarlo todo para solo operar personas en zonas en vías de desarrollo y en los Desayunos CIT lo deja claro por completo: «No me lo planteo no solo porque tengo mi familia y mi vida aquí, si no porque si me voy también habría mucha gente en Málaga a la que dejaría de ayudar y eso no es justo».
Una entrega a sus pacientes que reconoce sacrifica tiempo con la familia: «No se puede hacer todo al mismo tiempo, hay muchas veces que no veo a mis hijos en toda la semana. Esto hace perderte muchas cosas, pero también me hace disfrutar y valorar el tiempo que paso con ellos, aunque sea en los para muchas personas tediosos trayectos de coche mientras los llevo a futbol, música o danza. Yo los disfruto muchísimo».
Hay que valorar cada momento de la vida y, sobre todo, la salud, y en eso también incide el fundador de Bisturí Solidario: «El valor mas importante es estar vivo y con salud todos los días. Esto lo he aprendido mucho a través del sufrimiento de los pacientes, ver el sufrimiento de las personas enfermas debe servirnos para darle valor y tomar conciencia de lo que significa la plenitud de la salud».
